Integrantes del SOMU solicitan que hoteles de Chubut abran sus puertas para que los marineros sean alojados, pero hasta ahora no dieron el visto bueno, por lo que gestionan con Nación para que sean derivados a otros puertos. Se desconoce el motivo del gran brote de contagios.
En las últimas horas se dio a conocer que 13 barcos pesqueros, que se encuentran en alta mar en las inmediaciones de Puerto Madryn (Chubut), tienen 300 tripulantes que contrajeron coronavirus, aunque la mayoría llevan alrededor de un mes y medio sin tocar puerto, según confirmaron desde el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), razón por la cual pusieron reparos para que puedan cumplir con la cuarentena.
En relación a esto último, Juan Navarro, Secretario de Pesca del SOMU, expresó que en muchos hoteles “hay toda una psicosis” ya que no quieren prestar sus espacios para que las tripulaciones cumplan con el aislamiento y transiten la enfermedad allí, ante alguna complicación de sus estados de salud.
“Estamos en alerta, porque no vemos por dónde vienen los contagios. Hay barcos que no han hecho relevo, los muchachos llevan 45 días arriba del barco y han tenido contagios. No sabemos por dónde vienen”, aseguró en diálogo con FM del Viento. En cuanto a sus estados de salud, aseveró que la mayoría son asintomáticos y que “muchos prefieren quedarse en los barcos, pero necesitamos bajarlos”. Debido a que Madryn atraviesa una situación epidemiológica y sanitaria complicada y que no hay la infraestructura sufiente para hospedar a los marineros, Navarro afirmó que están tratando con Nación para que los barcos estén habilitados para dirigirse hacia otros puertos.
Ante esto, la comisión del SOMU (Raúl Omar Durdos, Secretario General; Juan Navarro, Secretario de Pesca; y David Villalba, Secretario del Interior) le envió una carta firmada al presidente Alberto Fernández para que les otorgue “garantías necesarias” para continuar con la actividad y no realizar un paro. En la misma, también le manifestaron las complicaciones que conlleva cursar la enfermedad en tierra ya que muchas provincias no quieren recibirlos por ser de otros distritos.
“En los últimos días ha escalado de manera exponencial la cantidad de tripulantes embarcados infectados por covid-19. Hoy son más de mil las trabajadoras y trabajadores a bordo de buques pesqueros en todo el país”, aseguraron.
“Ante ello las empresas pretenden se mantengan en rada sin asistencia médica por el término de 14 días más, lo que desde luego atenta contra todo protocolo sanitario conocido y el mínimo sentido del respeto por la salud de los trabajadores”, afirmaron sobre las 13 embarcaciones, por lo que pidieron a Fernández “la inmediata intervención a los efectos de obtener las garantías necesarias para poder seguir desarrollando nuestras tareas”.
“Hablamos de trabajadores esenciales, así declarados desde el inicio de la pandemia, que literalmente le están poniendo el cuerpo día a día, no solo por su compromiso profesional, sino también por el compromiso que tienen con el país, que más que nunca nos necesita a todos”, indicaron, al mismo tiempo que sostenían que el panorama es “insostenible” y que el gremio se encuentra “en la obligación de decretar el cese de toda actividad pesquera”.
El primer caso de un pesquero con tripulantes infectados fue el del Echazú Marú, en julio pasado, que llegó al puerto de Ushuaia con todos los navegantes contagiados luego de permanecer 35 días en alta mar. El primero que tuvo síntomas fue el médico de la embarcación a los 32 días de haber partido, y lo raro es que no tuvieron contacto con ningún. La única justificación que hay es que algunos marineros embarcados habían viajado a Tierra del Fuego en avión, en el cual viajaba un hombre que se convirtió en el primer fallecido de Tierra del Fuego a causa del virus. Sin embargo, esto sucedió días antes de embarcarse en alta mar y todos los tripulantes fueron controlados antes ingresar a la embarcación. Después siguieron casos en los puertos de Comodoro Rivadavia, Rawson y Puerto Deseado.
Jorge Frías, Secretario General de la Asociación Argentina de Capitanes de Pesca y delegado de la Liga Naval Argentina En Mar del Plata, indicó que que gracias a los protocolos no se presentaran (hasta ahora) pescadores contagiados. “Demasiado que aguantó cinco meses. Ahora hay que atender los problemas a medida que vayan surgiendo. Es decir, dar atención a los buques que se vean afectados”, lamentó a Infobae.
“Al principio los barcos permanecían en alta mar y estaban dos mareas sin desembarcar, pero no todos. Estibadores, reparadores, proveedores subieron al barco y ahí está la fisura. Es difícil controlar ya que el coronavirus camina por las calles y no hay manera de pararlo en los barcos. Ha habido un trabajo satisfactorio ya que estuvimos 5 meses sin casos. Los barcos están entrando a los puertos cada 5 o 6 días y también está la incursión de los fresqueros que lo hacen cada 2 días”, añadió.
Por último, dijo: “Todo se complica con el desorden que hay en los puertos, dado que todas las actividades se mezclan y a esta altura ya no se puede buscar un responsable en la marinería o capitanía porque también están los estibadores y otros trabajadores y se desmadró”.
