El bloque del Frente de Todos (FdT) del Senado tratará de revalidar 15 de las 24 bancas que este año se deben renovar en la Cámara alta, en tanto que la bancada de Juntos por el Cambio (JxC) y sus aliados arriesgarán las nueve restantes.
El Senado, como lo establece el sistema constitucional argentino, se renueva por tercios cada dos años y de a ocho provincias por vez.
El resultado definirá la integración de la Cámara alta aunque antes de llegar a ese punto la expectativa estará concentrada en el calendario electoral.
Existe la posibilidad de que el cronograma de 2021 sufra modificaciones tras el decreto del Ejecutivo que incorporó la organización de las elecciones de este año a las sesiones extraordinarias.
En las elecciones de 2017, la alianza entre el PRO, la Coalición Cívica y UCR pudo engrosar las filas del interbloque que encabeza el formoseño Luis Naidenoff.
Y en 2019, a pesar de la derrota en las presidenciales a manos del FdT y la dupla Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner, JxC logró aunar a casi una treintena de senadores, sumados los cuatro que integran el Interbloque Federal.
Por el oficialismo, la unión de los bloques Unidad Ciudadana y del Frente para la Victoria permitió amalgamar una bancada de 41 legisladores propios que alcanza los 43 si se cuentan los representantes del Frente Renovador de la Concordia de Misiones y de Juntos Somos Río Negro.
En octubre, entonces, será el turno de renovar a los senadores que representan a las provincias de Catamarca, Chubut, Córdoba, Corrientes, La Pampa, Mendoza, Tucumán y Santa Fe.
De esas provincias, cinco están gobernadas por el FdT, dos por JxC y la restante, Córdoba, por un mandatario de origen peronista pero que mantiene una línea política diferenciada de la Casa de Gobierno.